Bien, cierto es, tienes toda la razón. Pero al hablar de suplementarse con la toma de sales (en este caso era concretamente el cloruro de magnesio), daba por sobreentendido que en carrera (o entrenamientos, da lo mismo) había una pérdida de sales (y podía ser las causantes de los calambres) y estas se pierden por sudoración. Sudar es comenzar a deshidratarse si no se repone el agua perdida. De ahí mis comentarios. Pido disculpas si he malinterpretado el sentido del post en general.fahrenheit escribió:que yo sepa, corregirme si me equivoco, nadie ha hablado de los calambres por deshidratación.
Yo tmb pienso que es por someter al músculo a una carga que o está acostumbrado.
No obstante, me reafirmo en lo dicho anteriormente, si tienes calambres, suplementarse con sales no va a evitarlos ni a subsananrlos. Una cosa que sucede muy a menudo es, una vez iniciado el calambre, de forma natural y autoprotectiva, bajamos el ritmo automaticamente. Nos suplementamos con sales, comemos, etc, etc, y parece que los calambres remiten. Pues claro que sí, pero no por la ingesta de sales y demás, sencillamente porque hemos bajado la exigencia del ritmo que llevábamos y ya no estaremos reclutando tantas fibras musculares en el esfuerzo ni de manera tan intensa como antes de los mismos. Esto le proporciona al músculo un tiempo muy valioso para poder llegar a un estado de equilibrio entre las acciones llevadas a cabo por los "husos musculares" y los "órganos tendinosos de Golgi". Ambos son los responsables de marcarle al músculo hasta donde puede "estirarse" y hasta donde puede "contraerse" normalmente. Si ese equilibrio es alterado (y el esfuerzo físico continuado puede hacer que suceda, más aún el sobreesfuerzo), uno se excita más de lo debido mientras el otro se inhibe, ¡¡zaca!!, el calambre está servido. Por ahí van las teorías recientes sobre este suceso.
Si esta noche dispongo de un poco de tiempo, abriré un post al respecto.
Saludos.